La capacidad de la batería es una de las características clave de un teléfono inteligente. Las baterías de los teléfonos inteligentes son cada día más grandes. El último estándar de batería es de 5000 mAh, que promete un día completo de duración de la batería con una sola carga. La velocidad de carga también es de gran importancia en el mundo moderno. Por lo tanto, los fabricantes de teléfonos han introducido una función de carga rápida, que puede reducir significativamente el tiempo de carga de nuestros teléfonos.
Entonces, ¿cómo funciona la carga rápida?
Primero, necesitamos comprender conceptos como amperaje, voltaje y vataje. El amperaje es la cantidad de electricidad que fluye de la batería al dispositivo expresada en amperios (A). El voltaje es una medida de la presión que hace que fluya la corriente eléctrica expresada en voltios (V). El vataje es una medida de la potencia eléctrica expresada en vatios (W). Para calcular la potencia total, debe multiplicar los voltios por amperios. Por ejemplo, 5V x 2A = 10W. No tenemos en cuenta las pérdidas de energía en un cargador o un cable, ya que son insignificantes.
Con el conocimiento de cómo medir la potencia de carga, usted puede comprender fácilmente qué son los protocolos de carga rápida. Cuando un dispositivo y un cargador están conectados, sus protocolos se coordinan entre sí para obtener el voltaje y la corriente más adecuados. En pocas palabras, su teléfono y su cargador acuerdan la potencia máxima permitida para una carga rápida de la batería, que será segura para su dispositivo y no sobrecalentará la batería. Para saber qué protocolo de carga rápida usa su teléfono, usted necesita conocer la marca de su teléfono y el tipo de CPU.
Por lo tanto, conociendo la versión del protocolo de carga rápida que admite su teléfono inteligente, usted puede elegir el cargador adecuado que ayudará a acelerar el proceso de carga tanto como sea posible.
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